El último triunfo gallego sobre los amarillos se produjo hace nueve años y once meses, con un solitario tanto del argentino Berizzo
La cuarta y última vez que el RC Celta de Vigo logró vencer a la UD Las Palmas en su visita a la Isla ocurrió hace exactamente nueve años y once meses (26 de mayo de 2011). Fue en Primera División y los amarillos, a las órdenes de Sergio Kresic, curiosamente lograban aquel día la permanencia merced a los resultados que se conjugaban con el resto de los competidores. Sucedía dos jornadas antes de la conclusión del campeonato en el que Las Palmas acababa undécima y el conjunto celeste viajaba una vez más a Europa, como sexto de la Liga española.
Desde entonces muchas cosas han cambiado en ambos conjuntos que, atenazados por las deudas, acabaron acudiendo al Juzgado de Lo Mercantil y convirtiéndose en pioneros en buscar el recurso de la Ley Concursal en el fútbol español. El Córdoba es el último, al anunciar esta semana el inicio de un proceso de carácter voluntario.
En total, Las Palmas ha recibido al RC Celta de Vigo en competición de Liga en 26 oportunidades, tanto en Primera (19) como en Segunda A (7); también ha actuado contra el filial celeste pero en la Segunda División B, en dos ocasiones. Los triunfos amarillos como local fueron 14, con ocho empates y cuatro victorias gallegas. La última, como decimos, la provocó el solitario gol del central argentino Berizzo. Y en aquella alineación canaria sólo sobreviven Josico y Guayre, que fueron titulares, además de Jorge, que salió en la segunda parte por Samways.
Los tres últimos enfrentamientos han tenido lugar en el Estadio de Gran Canaria, desde 2007. El Celta perdió en dos ocasiones (1-0 en 2007-08 y 2-0 en 2008-09) mientras que la pasada temporada se registró empate (1-1), con el que sería el último gol de Marcos Márquez con la camiseta amarilla.
CUATRO VECES LÍDER
El desplome del Celta en la segunda vuelta de la vigente competición es muy relevante. Llegó a liderar la clasificación en cuatro jornadas (7, 25, 26 y 27) y ha ocupado plaza de ascenso directo en quince fechas. Sin embargo, un pobre parcial en las seis puntos en las ocho últimas citas de la competición le ha hecho perder el ritmo del ascenso de Betis y Rayo, que han escapado a nueve puntos de distancia y ya tocan con los dedos la Primera División.
El Celta que vuelve a Gran Canaria lo hará con la necesidad de ganar porque le pisan los talones y su plaza de promoción está seriamente amenazada de seguir tropezando en todas las zancadillas. Las Palmas, en cambio, todavía tiene que certificar de forma matemática su permanencia. No es un partido para el relax, ni mucho menos.
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