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| Koke Contreras |
El chileno recuerda que "la gente pensó que nuestra derrota fue un tongo", pero también valora que un año después "ganamos 2-1 en el mismo derbi y dimos un paso decisivo para quedar campeones"
Contreras, ahora entrenador del Club de Deportes Puerto Montt (Primera B del fútbol de su país), tuvo una experiencia muy amarga en su primer derbi en el Estadio Insular "en el año de mi debut en el equipo". Ocurrió el 20 de mayo de 1984, en la penúltima jornada, con el triunfo visitante 0-2 en un polémico partido que se saldó con los goles del hondureño Gilberto Yearwood (extraordinario disparo lejano que golpeó el larguero y entró) y Lasaosa. El choque de rivalidad tuvo su importancia porque pertenecía a la penúltima jornada de Segunda División y con esos puntos logrados en Gran Canaria el CD Tenerife evitó el descenso de categoría, en detrimento del Linares. "La gente pensó que fue tongo", recuerda Contreras al valorar el escándalo posterior en los graderíos contra dirigentes y jugadores. Fue tal el asedio que se originó en la entrada principal del Estadio Insular que "para abandonarlo tuvimos que esperar y salir por otras puertas no habituales" y así evitar el mal trago.
Contreras, ahora entrenador del Club de Deportes Puerto Montt (Primera B del fútbol de su país), tuvo una experiencia muy amarga en su primer derbi en el Estadio Insular "en el año de mi debut en el equipo". Ocurrió el 20 de mayo de 1984, en la penúltima jornada, con el triunfo visitante 0-2 en un polémico partido que se saldó con los goles del hondureño Gilberto Yearwood (extraordinario disparo lejano que golpeó el larguero y entró) y Lasaosa. El choque de rivalidad tuvo su importancia porque pertenecía a la penúltima jornada de Segunda División y con esos puntos logrados en Gran Canaria el CD Tenerife evitó el descenso de categoría, en detrimento del Linares. "La gente pensó que fue tongo", recuerda Contreras al valorar el escándalo posterior en los graderíos contra dirigentes y jugadores. Fue tal el asedio que se originó en la entrada principal del Estadio Insular que "para abandonarlo tuvimos que esperar y salir por otras puertas no habituales" y así evitar el mal trago.
Desde la distancia Contreras percibe que el partido del domingo será "como todos los derbis, con mucha igualdad". Él fue autor de dos tantos más contra el Tenerife un año después: "íbamos perdiendo 0-1 pero con mi gol y el de mi amigo Benito logramos la victoria, que consolidó nuestro primer puesto como campeón de Segunda División. Le marqué el tanto al Tenerife de espaldas y de cabeza, con la coronilla,". Este encuentro también pertenecía a la penúltima jornada y se saldó con el éxito absoluto de la mano de Roque Olsen. Desde la distancia, Koke pide "ganar al chicha", si bien no podrá seguir el partido en directo porque a la misma hora que la UD esté disputando el choque estará naciendo el domingo en Chile.
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