Buscar este blog

domingo, 23 de diciembre de 2012

EL GOL DE TODOS

Varias imágenes quedan registradas durante la que fue la última victoria de la UD Las Palmas en el año 2012: El diálogo de Guerrero y Lobera en la banda reflexionando ambos sobre la manera de abordar la muralla del Mirandés, los mensajes de complicidad de Nauzet con aficionados agradecidos por su loable profesionalidad en Huelva una semana atrás, el gesto del sancionado Murillo para felicitar casi en el terreno a sus compañeros en el día que estuvo sancionado, ... Pero nos llama la atención lo sucedido en el área del conjunto burgalés en los instantes previos al lanzamiento del penalti señalado contra el equipo visitante. Expliquemos:
Así fue la alegría del 2-0, obra de Thievy (C. Torres)
En el vestuario de la UD Las Palmas había conciencia plena de que a Thievy le faltaba el tanto desde hacía semanas para saciar o compensar su notable rendimiento en el campo de batalla. Los delanteros, sin el gol, se vuelven mustios. El galo quería presionar a los ejecutores titulares y cogió un balón en las manos para colocarse ante el punto de penalti. Durante algunos segundos, el portero Goitia estuvo observando con sorpresa porque le veía, junto a Momo, con idénticas intenciones, ambos con el esférico en sus respectivas manos y cerca del punto de penalti. Pero el capitán David García y algunos compañeros convencieron al galo de que había que seguir el rigor de lo colectivo. El interés personal de Thievy no podía imponerse al concepto prioritario ya establecido, donde Momo aparece como el primero de los ejecutores. 
Minutos después de que el zurdo grancanario errara la pena máxima hubo una segunda situación con un lanzamiento de falta directa al borde del área. El mismo dilema, pero Nauzet tiene la primera responsabilidad y fue quien la ejecutó sin fortuna. El juego de roles se respetó por encima de los deseos de un jugador. Thievy asumió con su actitud que primero es la Unión Deportiva y después las ambiciones individuales. Por eso cuando al fin el galo marcó, la alegría se desbordó entre sus compañeros, que incluso le invitaron a bailar; la recompensa a su disciplina y entrega había tenido un premio que comprendían todos los amarillos. El 2-0 de Thievy era en realidad el 2-0 de todos.

lunes, 17 de diciembre de 2012

ÁTICO Y SÓTANO

Una curiosidad: los primeros clasificados actuales de la Segunda División (Elche, Girona, Almería y Alcorcón) son cuatro de los cinco equipos que lograron doblegar a la UD Las Palmas en los partidos de Liga. El otro es el Castilla. El quinto clasificado es el Villarreal, que logró empatar en el Estadio de Gran Canaria. Todo aquello sucedió antes del advenimiento del modelo de juego actual, que ya suma nueve jornadas sin conocer la derrota (seis victorias y tres empates).
Segundo centro de atención: despiden la tabla clasificatoria Racing de Santander y Hércules, dos conjuntos sumidos en caos diferentes y a los que Las Palmas logró superar en distintas etapas del calendario de Liga actual.  El tiempo se les agota poco a poco sin lograr una reacción que les sirva para salir de ese agujero con tanto barro. Cada minuto en ese pozo es una pesada carga ... de la que en la isla nos hemos olvidado.
Las Palmas acabará 2012 con mucho positivismo porque su trayectoria, juego y confianza como colectivo le hará olvidarse de cántabros o alicantinos y fijarse en los que le preceden. Termina el año demostrando que realiza importantes avances competitivos y cada examen es un paso más hacia el optimismo. Sí, seamos prudentemente optimistas porque esto pinta bonito. Y si llega el fracaso de la empresa, que sea intentando alcanzar el ático, no luchando por salir del sótano.

lunes, 10 de diciembre de 2012

CORREN Y SONRÍEN

Hay algo diferente en esta UD Las Palmas, explosiva en las ocho últimas jornadas de Liga (seis victorias y dos empates). Es un equipo que corre agotando el combustible y que sonríe en el trabajo, de lunes a domingo pasando por los días de la función. Algo ha cambiado de manera radical, que se traduce en resultados, goles y una solidez defensiva propia de un conjunto competitivo al máximo. Si la UD de Sergio Lobera alcanza el mes de mayo próximo en estas condiciones, con este grado de confianza, efectividad y entereza moral, estaremos hablando de un aspirante al ascenso a la Primera División, sin precisar la vía final elegida. Ha sido difícil llegar hasta aquí; mantenerse es el más complicado reto.

La UD Las Palmas tiene, como colectivo, varias virtudes. Pero sin duda la velocidad es la característica de su ataque que mayores dividendos le puede proporcionar. ¡Qué curioso contrasentido!; el estilo grancanario, otrora marcado por su fútbol pausado pero técnico, ahora es el más veloz de la Segunda División española, con varios hombres que poseen ritmos desbordantes para las defensas rivales, como pudo comprobar este sábado el Huesca. Cada vez que el balón partía en vertical y en la jugada estaba Thievy, la acción acababa en un disparo peligroso, un pase de gol o una ocasión abortada in extremis por los zagueros aragoneses.

Pero no es sólo el francés Thievy el que pone la quinta velocidad a las ofensivas. Hay más llegadores, incluso respaldados por un punta veloz como Chrisantus que este sábado dejó muestras de que con él se puede también contar cuando el equipo opte por cargas como las del Séptimo de Caballería. La UD Las Palmas actual presenta uno de los mejores contragolpes que le recordamos a través de la historia en las últimas décadas. Porque con los Vitolo, Nauzet y Momo como complementos la variedad de opciones de remate la pueden padecer las defensas adversarias si vuelven a repetirse situaciones tan favorables como las generadas ante el Huesca.

Además, en esta ocasión, Lobera optó por vaciar la posición de ariete desplazando a veces a los costados o al centro del campo a Thievy Guivane. Los centrales Alex Pérez y Luis Helguera no tenían a quien seguir; esperaban. Y en estas acometidas estuvieron en desventaja rítmica en la práctica totalidad de las ocasiones. Habrá fórmulas para contener el juego que propuso el equipo amarillo, sin duda, pero esta vez no la encontró Antonio Calderón y mucho menos sus elegidos para defender la avalancha que les cayó en el Estadio de Gran Canaria.

Al equipo grancanario se le ve realizado en este juego de contras, que en la mayoría de las ocasiones comienza con un robo de balón. Una jauría de carteristas amarillos insisten en el centro del campo, con la presión coordinada como orden global. Sacrificados y laboriosos, a los jugadores se les ve satisfechos, felices ... Peligroso enemigo el que, además de vaciarse en el campo, acude al vestuario con una sonrisa.

sábado, 1 de diciembre de 2012

MADE IN VITOLO

Cerremos los ojos y enfundemos una camiseta de Champions al jugador que este sábado, en el minuto 29, arrancó como un pura sangre en el Estadio de El Molinón; una galopada que aderezó con su amplia zancada, criterio vertical y aguante de tarascadas. La culminaba ese futbolista con la serenidad de un tiburón del área; sereno y preciso, sin alterar su pulso. Esos sesenta metros de carrera que Vitolo transitó a todo tren hasta el 0-1, con la velocidad de ejecución y poder físico exhibido, está al alcance de unos pocos elegidos. Y no por su condición de integrante de un club modesto desmerece en absoluto todo el elogio que pudiese dedicarse a la extraordinaria confección de un tanto que le señalará en el futuro.
Vitolo, en la jugada del 0-1 (El Comercio / Especial para Tinta Amarilla)
En los próximos años, cuando la UD Las Palmas regrese a jugar con el Sporting en tierra asturianas, recordaremos este excepcional gol de Vitolo que llega, además, siete días después de su severo 'hat trick' al Córdoba. Vive sus días más brillantes desde que es profesional de la primera plantilla grancanaria y descubre, además, que centrado y tranquilo puede llegar en su profesión donde lo desee, porque posee un don.
Un gesto individual de Vitolo esta vez representa una recompensa para su equipo, que sufrió lo indecible ante un Sporting del que no se explica su bajo rendimiento. Las Palmas está en racha; Vitolo también, y los postes, Barbosa, ... en la dinámica positiva hay recompensas. Y regalos para la vista como este gol de Vitolo al que bien le pudo acompañar el 'ta-ta-ta' auténtico del narrador argentino Víctor Hugo Morales.